Hace unos meses atrás publiqué una breve reseña del estudio que demuestra que en el uso del Internet por parte de los escolares en el Perú "no hay efectos positivos en su aprendizaje de matemáticas y lectura, habilidades cognitivas, autoestima, percepciones de los docentes, o calificaciones escolares".

Pese a ello, resulta interesante conocer la brecha digital en hogares que existe en nuestro país, la misma que se puede analizar en el siguiente cuadro:

Hay un contraste grande, mientras que Lima muestra un 52.9% de penetración, Huancavelica presenta tan solo un 2.6% de penetración. Es decir, mientras que en Lima 53 hogares de 100 tienen acceso a Internet, en Huancavelica tan solo 3 hogares tienen acceso. 

Este acceso a información y trámites públicos desde el hogar aumenta una brecha de desigualdad ciudadana severa. Y claro, explica también por qué en algunas zonas todavía hay cabinas y en otras no.

Es oportuno indagar qué ha sido de la Red Dorsal Nacional de Fibra Óptica (RDNFO) y de las estrategias para ampliar el acceso de Internet a escuelas, comisarías, hospitales, además de hogares claro está; pero siendo fue el primer grupo la promesa durante el trabajo de relacionamiento para dicho tendido. Sin lugar a dudas, el posible el acceso a Internet para la mayoría de niños del Perú se juega en las escuelas públicas.

Conviene conocer proyectos como Educación Digital que buscan justamente cerrar estas brechas. Pero necesitamos conocer los números grandes del proyecto como cobertura o tiempo de exposición de los niños a la tecnología (lee el reportaje en Andina sobre este proyecto) para tener una mirada integral.

Si bien el proyecto es insuficiente para cubrir la brecha, necesitamos más iniciativas, pero sobre todo una estrategia país. ¡Hay mucho por hacer!